A partir de 1912, con la aprobación del Proyecto de Ensanche de la ciudad, se llevó a cabo la progresiva urbanización de la margen izquierda del Turia, lo cual fue acompañado de la construcción de más puentes que facilitarían tanto el tráfico rodado como el acceso peatonal entre las dos riberas del río.
Desde 1607, con la construcción del puente de San José, no se había construido ningún otro salvo dos pasarelas peatonales, el llamado puente de madera de 1892, actualmente Passarela Pont de Fusta , y la pasarela de la Exposición de 1909 convertida en 1995 en el puente del mismo nombre.
Desde el parque de Cabecera, si seguimos aguas abajo, el primer puente que encontramos es el Puente del Nou d’Octubre, de 1989, del arquitecto valenciano Santiago Calatrava. Consta de dos calzadas separadas, apoyadas sobre soportes de hormigón y acero, y flanqueadas por pasarelas peatonales. En las cuatro esquinas descubrimos sendas rampas para bajar al río y sendos soportes de hormigón que sustentan cada uno una escultura metálica de forma abstracta, todas iguales.
Dejando atrás una pasarela peatonal, nos salen al encuentro el Puente de Campanar o de Tránsitos de 1958 y después el Puente de Ademuz o de las Glorias Valencianas, ambos con doble calzada y barandillas de hierro, sin ningún ornato especial.
Tras una pasarela peatonal, viene a continuación el Puente De les Arts, 1998, formado por dos calzadas separadas, apoyadas sobre pilares comunes ubicados en el espacio central, de los que parten vigas, a modo de ménsulas, que llegan hasta los extremos de aquellas.
Sobre cada pilar vertical descansa una farola blanca, del mismo color que las barandillas de las aceras.
La Pasarela de la Exposición de 1909, llamada así por tomar parte en la Exposición Regional del mismo año y en la Nacional de 1910, fue sustituida en 1967 por un puente, ya no sólo peatonal, apoyado sobre siete arcos escarzanos y con barandilla metálica.
En 1995 dicho puente fue sustituido por otro, diseñado por Santiago Calatrava, llamado Puente de la Exposición, y popularmente De la Peineta.
El puente, constituido por un arco metálico de una inclinación de 70º, apoyado sobre la calzada que, a su vez, descansa sólo en los dos flancos del cauce, consigue un aire de absoluta ligereza, una liviandad que contrasta con la robustez de los otros puentes, especialmente si pensamos en los antiguos.
La calzada, de una sola dirección hacia afuera desde el centro histórico, está bordeada por aceras con barandillas metálicas apoyadas sobre ménsulas.
La modernidad de este puente descansa no sólo en su estética, sino también en el diseño de su construcción, pues todos recordamos como algo extraordinario cómo el puente fue desplazado desde el lugar en el que había sido construido hasta su ubicación definitiva, mediando unos 50 metros de separación, para simultanear las obras de la estación de metro de la Alameda.
Bibliografía:
-Catálogo Monumental de la ciudad de Valencia, Caja de Ahorros de Valencia, 1983
-Guía de Arquitectura de Valencia, CTAV, 2007
Imágenes:
*Escultura abstracta en el Puente del Nou d'Octubre
**Detalle de pilares en el Puente del Nou d'Octubre
***Detalle de una de las dos calzadas y pilares comunes en el Puente De les Arts
****Puente De la Exposición